El Calderí


Algunas personas me preguntan ¿por qué "El Calderí"?, y bueno, aunque es una historia muy larga, os contaré a grandes rasgos por qué decidí bautizar con ese nombre a mi proyecto. ¿Quién ha tenido la suerte de visitar alguna vez la vila termal de Caldes de Montbui?. Los que hayáis respondido afirmativamente sabréis que en la plaza principal de este maravilloso pueblo se encuentra la "font del lleó" (fuente del león), un manantial natural de agua termal, donde el agua brota a 74ºC de temperatura durante los 365 días del año desde tiempos inmemoriales. Esa fuente está custodiada por un magnificente león de piedra con semblante apacible, divino y señorial que permanece inalterable pese al devenir de los tiempos.
Caldes de Montbui es una tierra a la que amo profundamente, pues en sus calles he vivido, reído, llorado y amado, compartido momentos inolvidables en familia, disfrutado sus cálidos veranos y "sufrido" sus rigurosos inviernos. En Caldes los abriles son verdes, espigados y salpicados de amapolas rojas, los junios amarillo-pálido, color y aroma de trigo, y los julios huelen a pólvora, y a historias de fuego y agua. Los octubres son alegres, cuando sus calles se llenan de gentes que se entremezclan con diablos que celebran su fiesta mayor; los noviembres, dulces. Y los diciembres se llenan de lucecitas, bueno, eso en casi todas partes. Pero en este pueblo hasta la navidad es aún más especial, porque los calderinos saben "fer poble" (una expresión que se usa mucho en cataluña y que significa que la gente se involucra en las actividades del pueblo) aunque a lo que diga yo no hay que darle mucha importancia, porque con la niña de mis ojos no puedo ser imparcial... 
"El Calderí" es un homenaje a la que considero mi casa, al lugar al que quiero volver una y otra vez, para recorrer sus calles y ver a sus caras conocidas, dónde dejé a una parte de mi familia, amigos, y también una parte de mi alma. 
Un calderí es un niño nacido en Caldes, y mi sueño es como mi niño, al que quiero cuidar y ver crecer, y si mi niño tiene que ser de alguna parte, es de ese pueblo abrigado por un monte abonado por los restos de un gigante. Ojalá el león de piedra custodie por muchos siglos ese manantial de vida, ese milagro de agua que lucha incesante por abrirse camino en un mundo de fuego en su ascenso hacia la luz. 


MD
<3

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